Al enumerar las virtudes, el filósofo las describe como el justo medio entre dos extremos viciosos, uno por exceso y el otro por defecto. Por ejemplo, la valentía se sitúa entre la imprudente temeridad y la viciosa cobardía de Homer. De igual modo, una persona que posea el control de sí misma no buscará satisfacer sus deseos a la manera de Barney, pero tampoco mostrará la indiferencia hacia los placeres físicos que caracteriza a Ned Flanders; su comportamiento se situará en cambio en el justo medio entre estos extremos. Las personas que tienen la virtud de la generosidad no hacen dádivas indiscriminadas (por lo que no despilfarran sus recursos, como hace Homer de vez en cuando), pero tampoco son tacañas como suele ser el Sr. Burns. Así pues, podemos definir cada una de las virtudes que Aristóteles señala al ponerla en relación con los dos extremos viciosos correspondientes.
Los Simpson y la filosofía, AA. VV. ed.BlackieBooks, pág. 76